En mi primer embarazo, el apoyo de Pamela fue fundamental. Antes y después del parto, me ofreció valiosos consejos, respetando siempre mi forma de afrontar esta nueva aventura. Escucha con atención, sin juzgar, y adapta sus recomendaciones a nuestras necesidades y valores. Gracias a ella, mi lactancia fue maravillosa, sin ningún problema. Estuve tranquila y preparada, ya fuera para la bajada de leche, la elección de cremas calmantes o el uso del sacaleches. Todo esto sin sentirme presionada. ¡Solo puedo expresarle mi gratitud y la recomiendo encarecidamente!